La declaración del Estado de Alarma el 14 de marzo de 2020 debido a la pandemia de la Covid-19 supuso un antes y un después para toda la sociedad y un duro golpe para el sistema sanitario y de la salud pública. Tras estos dos años y cuando parece que empiezan a remitir los casos puede ser un buen momento para hacer balance de la situación en la que se encuentran los profesionales de la salud pública y de las unidades de vigilancia; del sistema sanitario y de la investigación. Pero también, de empezar a trazar las líneas de actuación para fortalecer todas las debilidades que se han puesto de manifiesto.
La Sociedad Española de Epidemiología (SEE) recordaba esta semana que los recursos en las unidades de vigilancia en salud pública "siguen siendo marginales" y que los profesionales "acusan un grave agotamiento físico y mental". Una situación que, además, afecta a la vigilancia de otras enfermedades y problemas de salud más allá de la Covid-19, "si no conseguimos que el desarrollo y mantenimiento adecuado de los sistemas de salud pública se convierta en una prioridad para nuestros decisores, corremos el riesgo de que parezca que todo ha pasado y que no hace falta nada más", apuntan.
Imprescindibles
La pandemia ha puesto de manifiesto la importancia del sector, pero también grandes carencias, tanto en equipos humanos como en infraestructuras. Además, los epidemiólogos lamentan que los sistemas de información con los que se cuentan sean mucho más obsoletos que los del ámbito asistencial, estén escasamente automatizados y sean poco interoperables entre las diferentes unidades del sistema.
El SARS-CoV-2 provocó "el abandono de tareas imprescindibles" en la vigilancia, prevención y control de otras enfermedades, infecciosas y crónicas, y problemas de salud. El trabajo de vigilancia de la Covid-19 recayó de lleno en el personal encargado de la vigilancia en salud pública que se ocupa, entre otras, de la vigilancia de las 61 Enfermedades de Declaración Obligatoria (EDOs).
Prueba de ello son las cifras que aporta la SEE. En dos años, se han producido más de 10 millones de casos Covid-19, una cifra muy superior al número total anual de EDOs de declaración nominal, aproximadamente 150.000, además de unos 750.000 casos de gripe que se recogen de forma agregada, según los últimos datos disponibles (2018).
Qué pide la Epidemiología
Desde la Sociedad Española de Epidemiología piden una nueva estructura de salud pública que permita dar un paso más allá de la vigilancia de enfermedades transmisibles, ampliando la vigilancia a las enfermedades crónicas, los riesgos ambientales o los determinantes de la salud y sus desigualdades. Así lo han expresado en el proceso de consulta pública previo del Real Decreto de Vigilancia en Salud Pública recientemente abierto por el Ministerio de Sanidad.
Según indican desde la SEE, se necesitan estructuras fuertes, comenzando por la creación y desarrollo del Centro o Agencia Estatal de Salud Pública, que integren todas las actividades relacionadas con la salud pública y en la que incluya el redimensionamiento de las plantillas de profesionales, tanto a nivel autonómico como estatal. Además, apuestan por implantar sistemas de información automatizados e interoperables y establecer canales de coordinación sólidos entre las diferentes administraciones.
Éxitos y fracasos
En la
Agencia SINC hablan de la publicación de un número especial de la
revista Science con artículos de investigadores de todo el mundo, en la que se ofrece
una mirada retrospectiva sobre los éxitos y fracasos en ciencia y política, lo que hemos aprendido hasta ahora sobre el virus y la enfermedad y cómo esto puede ayudar frente a futuras pandemias.
Declaración de Zaragoza
También esta semana se aprobaba por unanimidad de "La Declaración de Zaragoza sobre Vigilancia en Salud Pública" por parte de los integrantes del Sistema Nacional de Salud, reunidos en Zaragoza. El Ministerio de Sanidad anunciaba la constitución de un grupo de trabajo en el seno de la Comisión de Recursos Humanos del Consejo Interterritorial de Salud que elaborará una propuesta antes de que finalice este año con el objetivo de mejorar la política de personal en este área.