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A la línea de ayuda de Aragón llegan demandas de ayuda de todo tipo, que pueden satisfacerse en la misma llamada, o precisar de un abordaje por parte de profesionales voluntarios del área psicosocial
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El número de llamadas al Teléfono de la Esperanza de Aragón se incrementa un 16% en 2018 con respecto al año anterior
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El Teléfono de la Esperanza de Aragón lleva a cabo una importante labor preventiva del suicidio, facilitando que la persona en situación de riesgo, acceda a la red de recursos socio-sanitarios para recibir una atención integral
El Teléfono de la Esperanza de Aragón (976232828) es un recurso que ofrece ayuda a personas y familias que atraviesan una situación de crisis. El año pasado atendió 6.694 llamadas, lo que supone un incremento del 16 % respecto al año anterior y consolida una tendencia al alza que este servicio presta en Aragón.
Las llamadas registradas el año pasado las realizaron un 40% hombres y un 60% mujeres. De ellas, un 51,82% estaban motivadas por problemas psicológicos y psiquiátricos, mientras los problemas relacionales o familiares fueron el 14,28%.
Las situaciones más comunes fueron la soledad y aislamiento (21,47%), los trastornos de ansiedad (13,31%), estado deprimido (7,69%), crisis en proyecto vital y crisis de valores (3,96%), trastorno mental (3,88%), y problema familiar (3,61%). Por edades, el 23,83% eran personas de entre 36 a 45 años, el 26,61% de entre 46 a 55 años, el 24,43% de entre 55 a 65 años y 9,33%, mayores de 65 años.
Los profesionales del
Teléfono de la Esperanza en su informe de balance
llaman también la atención sobre el porcentaje de llamadas de contenido suicida (1,06%), que se ha mantenido estable respecto al año anterior. Un 11,65% del total de las llamadas atendidas ha tenido una
acción preventiva del suicidio, ofreciendo continuidad tanto en prestación de servicios profesionales en sede como en la red de recursos sociales y sanitarios de la comunidad ante este problema de salud pública.
En 2018, se atendieron 1.648 llamadas relacionadas con la soledad y el aislamiento, frente a 1.087 el año anterior. Un incremento de llamadas especialmente significativo con un aumeto tanto en porcentaje (3%) como en número de llamadas.
Ante el problema sanitario y social de la soledad, sigue teniendo preeminencia el contacto telefónico, tanto para personas mayores como para otros grupos de edad, por el anonimato, por la cercanía del encuentro personal, por la atención especializada que reciben las personas que llaman ante una situación de crisis. "Aunque el Teléfono de la Esperanza también presta servicios online, en los que también están presentes el anonimato y la confidencialidad, la demanda de atención telefónica es la que prefieren la mayoría de nuestros usuarios", explican desde esta ONG.
Fotografía: Ezra Comeau-Jeffrey (Unsplash)